Este ha sido un año muy positivo para Alex Márquez, su primero al mando de una Ducati Desmosedici y con Gresini. Después de haber estado a bordo de una Honda RC213V, el dos veces campeón del mundo no tuvo problemas en decir que la moto italiana le permitió hacer cosas que no esperaba hacer.
Para Moto.it, el piloto admitió que la Desmosedici le dio las herramientas para ser más rápido que nunca, a pesar de ser el tipo de piloto que no siempre va rápido desde el principio: «No soy un piloto que va rápido desde el principio, pero con esta moto he podido ser rápido, ganar una Sprint, un podio, una primera fila, una pole y he hecho cosas que no esperaba hacer».
Los objetivos hacia 2024 son ser aún más competitivo: «El objetivo era estar entre los siete u ocho primeros y el próximo año daré el siguiente paso para luchar por cosas más importantes».