Después de 11 participaciones en motocicletas, Laia Sanz decidió hacer un cambio y hace unas semanas completó su tercer Dakar en cuatro ruedas. La piloto de 38 años dice que no se arrepiente de su decisión.
‘Extraño muchas cosas. No extraño correr tantos riesgos, pero sí extraño socializar con mis compañeros de equipo y la vida cotidiana, porque tenía una moto de rally en casa y entrenaba todos los días, algo que no puedo hacer con los autos. También me gustaba la tranquilidad que tenía en los últimos años de mi contrato. Firmabas por dos o tres años y podías trabajar como quisieras, sin pensar en lo que tendrías que hacer al año siguiente o en que tendrías que comenzar un nuevo proyecto desde cero, como es el caso ahora. No sería perezosa para volver a prepararme para correr en motocicleta, pero es muy peligroso y ahora estoy en un punto diferente con los autos’ dijo Laia en una entrevista con el periódico Sport.
‘No hay forma de que vuelva a montar en motocicleta. Ahora miro las cosas y pienso en lo loca que estaba, que me perdí al participar 11 veces, no dos o tres por error, sino 11’ agregó la experimentada piloto riendo en otra conversación con AS.
La última vez que participó en el Dakar en dos ruedas, Laia terminó en el puesto 18 en la clasificación general de motocicletas.