Luca Marini volvió al trabajo esta semana en Sepang en la prueba de MotoGP. El piloto de Repsol Honda se subió a la pista en el segundo y tercer día, familiarizándose con la última versión de la RC213V.
El italiano disfrutó de las sensaciones de conducción, pero admitió que la velocidad no es la deseada, como dijo citado por GPOne.com: ‘La moto tiene buen potencial, es agradable de conducir cuando estás solo… porque no ves el rendimiento de los demás [risas]. Te sientes como si estuvieras haciendo un buen trabajo, pero cuando cruzas la línea de meta, el tiempo es un poco más lento de lo esperado. Tenemos mucho trabajo por hacer; es la primera vez que salimos a la pista con la nueva moto, y es muy diferente a la del año pasado’.
En este punto, Marini pide un enfoque inteligente, reconociendo que el proceso lleva tiempo: ‘Tenemos que ser inteligentes para progresar en el menor tiempo posible; tenemos concesiones, pero no es muy fácil hacerlo rápidamente. Ducati y KTM trabajaron en su configuración durante años; nosotros apenas estamos comenzando ahora’.