Miguel Oliveira comenzó la temporada de MotoGP con solo un punto en el GP de Qatar, ya que terminó en el puesto 15 en la carrera principal. Había un sentimiento de que había potencial para más, pero las cosas no salieron como él esperaba.
El piloto de Trackhouse Racing recordó la ronda de Losail en una entrevista con SportTV: ‘Catar fue un fin de semana entero de «casi, casi»: casi en el top diez, casi en Q2, casi luchando por el top diez en la carrera. Realísticamente, si no hubiera hecho la Vuelta Larga, tal vez hubiera podido terminar octavo, pero no creo que más que eso. Y fue un fin de semana entero de recuperar velocidad, una velocidad que no habíamos demostrado en las pruebas. Aunque mejoré mi tiempo en comparación con las pruebas, terminé a menos de una décima de poder entrar en el top diez, y como sabemos hoy en día en MotoGP, el peor lugar para estar es allí en esa línea en medio de la parrilla. Además de eso, no tenemos una Aprilia con un inicio muy explosivo, el inicio en sí no es un punto fuerte de la moto, pero estamos muy enfocados en mejorar eso. Junto con todo eso y comenzando allí en el medio, las cosas pueden salir muy bien, o podemos caer en una zona muy gris, que es donde caí. Incluso montando bien y gestionando bien los neumáticos, no fue posible terminar más alto que el 15º’.
Preguntado si hay una estrategia delineada para el inicio, Oliveira respondió: ‘No, no la hay. Es completamente espontáneo. Depende mucho de nuestra posición de salida y de quién tenemos a nuestro lado. Por lo general, KTM y Ducati tienen un muy buen inicio, y se vuelve muy difícil luchar por posiciones cuando llegas a la primera curva siendo adelantado. Llegas a velocidades completamente diferentes, y al ser adelantado, llegas más lento, y no puedes frenar más tarde para compensar esa diferencia de velocidad. Así que, se convierte en un trabajo complicado, pero estoy enfocado en hacer mi mejor vuelta a vuelta, y comienza desde el viernes por la tarde para entrar en el top diez’.