Koenigsegg ha decidido terminar con el motor de tres cilindros, que fue elegido para equipar el Gemera, el primer superdeportivo de cuatro plazas de la marca.
La confirmación fue hecha por Christian von Koenigsegg, CEO de la empresa, en una entrevista con el podcast «Top Gear Magazine», donde dejó claro que el motor de combustión interna de tres cilindros será reemplazado por un V8.
Recuerda que el Gemera fue presentado inicialmente con una arquitectura de motor de gasolina, turboalimentado, de tres cilindros y 2.0 litros con 600 CV de potencia y un par motor de 600 Nm, combinado con tres motores eléctricos de flujo axial, que aumentaban la potencia total a 1700 CV y un par máximo de 3500 Nm, y aún podía recorrer hasta 50 km en modo 100% eléctrico.
Sin embargo, la elección de un motor de tres cilindros no fue del agrado de los clientes de la marca, que estaban acostumbrados a ver modelos de Koenigsegg equipados con un V8.
De esta manera, la marca sueca reemplazará efectivamente el motor de tres cilindros con un V8 de 5.0 litros, que produce 1298 hp y un par máximo de 1500 Nm. Con el V8 combinado con la tecnología híbrida de tres motores eléctricos, el Gemera ahora tiene una potencia combinada de 2300 hp.
Es cierto que Christian von Koenigsegg no abandonará completamente el motor de tres cilindros, habiendo avanzado que la marca seguirá trabajando en este motor y que algún día podría equipar una nueva versión del Gemera.
Por ahora, es seguro que el superdeportivo de cuatro plazas utilizará un V8 y que la producción del potente Gemera está programada para comenzar más adelante este año, con las primeras entregas de las 300 unidades que la marca producirá esperadas en 2025.