El comienzo del Gran Premio de Cataluña de MotoGP no fue alentador para Marc Márquez, quien no logró clasificar para la segunda ronda de clasificación y comenzó desde el 14º puesto. Sin embargo, hizo una remontada y terminó en el podio en ambas carreras.
El piloto de Gresini admitió que el primer año con un nuevo fabricante presenta desafíos que pueden llevar a un inicio lento durante el fin de semana: ‘Es una de las cosas difíciles cuando estás en el primer año con una moto. En cada circuito puedes ver un poco lo que hicieron el año pasado, pero con tu estilo de conducción todo es diferente. Y luego cuando empezamos y tenemos algunos problemas, siempre estamos retrasados’.
Márquez progresó el sábado y, aunque está satisfecho con el tercer lugar en la carrera principal, admitió que necesitan mejorar en la vuelta rápida:
– El sábado por la mañana probé algo que me ayudó mucho, que estaba más en la dirección de las otras Ducatis, y eso ya me dio el ritmo. Pero ahora necesitamos entender cómo hacer la vuelta rápida, cómo evitar ese empuje delantero que es uno de los problemas de la moto de 2023. Pero estoy súper feliz porque perdemos un poco allí, pero luego ganamos en otros puntos. Estoy feliz y aquí en Montmeló para mí fue súper importante estar en el podio porque es uno de los circuitos más difíciles.
Respecto a lo que cambió en la Ducati Desmosedici GP23 que le permitió ser más competitivo, el ocho veces campeón del mundo aclaró: ‘Ajuste, y luego con el ajuste se ajustan las electrónicas: cada ajuste tiene sus electrónicas‘.