Voge está desarrollando un nuevo sistema de estabilidad para ayudar a maniobrar y estacionar motocicletas.
En los últimos años, hemos visto varias versiones de motocicletas autoequilibradas, desde los conceptos Riding Assist de Honda hasta los proyectos Motoroid y AMSAS de Yamaha, todos basados en máquinas capaces de dirigirse por sí mismas y utilizando impresionantes conjuntos de giroscopios y sensores de inclinación para mantenerse en posición vertical a baja velocidad o incluso cuando están detenidas. Incluso Harley-Davidson ha trabajado en su propia versión de la idea. La empresa matriz de Voge, Loncin, ha presentado una solicitud de patente para un sistema que tiene como objetivo resolver algunos de los mismos problemas simplemente con un par de ruedas desmontables que se parecen mucho a las ruedas de entrenamiento de una bicicleta infantil.
El objetivo es fabricar motocicletas que no se caigan cuando están detenidas o se mueven a muy baja velocidad, ya sea que las estén empujando o cuando están arrancando o frenando. Este es a menudo el momento más estresante para un nuevo motociclista, y tanto los desarrollos japoneses como las ruedas extensibles adicionales de Voge tienen como objetivo eliminar este riesgo a baja velocidad. Entonces, aunque pueda sonar ridículo, la idea tiene mérito. Incluso hay soluciones postventa similares a esto que ya están en el mercado, como LegUp LandinGear, diseñadas para ayudar a los motociclistas que, tal vez debido a una discapacidad, no pueden soportar el peso de sus motos pero no quieren dejar de conducir.
La idea de Loncin es un poco más compleja que simplemente instalar ruedas de entrenamiento eléctricas que se extiendan desde el basculante, pero sigue siendo un conjunto independiente que se puede instalar en prácticamente cualquier motocicleta con un basculante de doble cara. Las ruedas adicionales se pueden extender con solo tocar un botón o automáticamente cuando te detienes, pero en lugar de simplemente estirarse a una longitud fija, tienen sensores en cada pata que se activan cuando la rueda de esa pata toca el suelo, lo que permite que el sistema funcione en una superficie irregular o en una carretera sinuosa.
La solicitud de patente ilustra dos versiones de la idea. La primera tiene las ruedas montadas en brazos de suspensión, que giran en su extremo trasero y son accionadas por brazos eléctricos unidos al basculante de la motocicleta delante de ellas. La segunda variante utiliza un sistema de paralelogramo, con dos barras de unión laterales conectadas a un soporte con la rueda en la parte inferior.
Voge ya tiene una presencia en rápido crecimiento en Europa, con una gama de motos desde 125cc hasta 650cc. Loncin ya fabrica este motor en nombre de BMW, por lo que el acuerdo es similar al que permite a CFMOTO utilizar el bicilíndrico de 799cc de KTM en el Ibex. La moto presentada en la nueva patente es la Voge 525DSX, una moto de aventura con un motor bicilíndrico que fue lanzada a principios de este año.
Además de ayudar a evitar caídas embarazosas a baja velocidad, la idea también haría innecesario el caballete lateral o central tradicional, actuando como una especie de caballete permanente y extensible que entra en juego cuando la moto está estacionada y ayuda a compensar parte del peso adicional que lleva.