Si se necesitaban pruebas, la temporada 2023 dejó en claro que las motos de MotoGP son más rápidas que nunca. Solo el año pasado, se rompieron récords de vuelta en 15 de las 20 pistas del calendario. Mirando hacia el futuro, la idea es hacer que las motos sean más lentas por razones de seguridad y para mejorar el factor de entretenimiento. Este es un tema abordado por el CEO de Aprilia Racing, con tres años antes de la implementación de una nueva regulación en 2027.
El italiano dijo a SPEEDWEEK.com: ‘Tenemos la obligación y el objetivo de hacer que las motos sean más lentas, por la simple razón de que las pistas no son lo suficientemente grandes. Hay preocupaciones de seguridad y deben ser respetadas’.
Pero no solo se trata de seguridad en lo que Rivola se enfoca: ‘Diría que claramente tenemos que hacer algo por el espectáculo, considerando dispositivos como ajustadores de altura de conducción y aerodinámica que acortan significativamente la fase de frenado. Cuanto más corta sea la fase de frenado, menor será la posibilidad de una maniobra de adelantamiento. Hacer que esta fase sea más larga beneficiará el espectáculo. Estos son los dos objetivos principales’.
No obstante, el ingeniero cree que una moto de MotoGP debe seguir teniendo características muy únicas y diferenciadoras: ‘Sigo pensando que una moto de MotoGP debería ser como un avión de dos ruedas, algo completamente diferente a una moto de carretera normal y algo que no todos pueden conducir’.